El día de hoy comienza con un maravilloso viaje, sobrevolando el desierto de Arizona... pero, ¡una catástrofe sucede y el avión sufre un accidente! Los supervivientes comienzan entonces una aventura con linternas, cuchillos, paracaídas, espejos, poca agua...
De entre ellos, dos se enamoran... pero resulta que éstos, Genoveva y Humberto, al cabo de un tiempo, tienen algunos problemas sentimentales debido a un barquero picarón, así que la muchacha ha decido conocer mundo... pero, ¡¡qué mala pata!!, en mitad de su viaje le pilla un holocausto nuclear.
Resulta que logra sobrevivir, y empieza una nueva vida en una nueva sociedad.
Cuando ya es una viejecita, recuerda su deseo de conocer mundo, así que coge sus cuatro cosas, las echa en una maleta y se larga a Suiza. Allí, en un restaurante, le sucede una curiosa anécdota con un hombre negro que la invita a comer y le da un par de lecciones sobre las personas y los prejuicios.
Y todo esto, sin lograr ponernos de acuerdo... pero aprendiendo entre risas.
P.D.: No menciono la exposición de los proyectos porque quiero esperar a que se hayan expuesto todos para publicarlos.
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Cartagena - CALLE GISBERT
ResponderEliminarLa calle Gisbert se abrió en 1878, demoliendo el monte de La Concepción, para conectar la calle Caridad con el nuevo muelle de Alfonso XII.
Cartagena-PERSONAJES
ResponderEliminarRICARDO CODORNIU Y STÁRTICO
Ricardo Codorníu y Stárico, Ingeniero de Montes y defensor a ultranza de la causa forestal, llevó a cabo multitud de proyectos entre los que destacan la reforestación de la Sierra de Espuña y su colaboración en la detención de las dunas que anegaban Guardamar.
Hombre generoso, pionero y proselitista de sus ideas de conservación de los árboles y las aves, Ricardo Codorníu, conocido como 'el Apóstol del Árbol', dedicó su vida a la difusión y enseñanza del medio forestal mediante conferencias y diversas publicaciones.
Visionario con profundas y diversas inquietudes, también fue uno de los responsables de la introducción en España del Esperanto, un proyecto de creación de una lengua común para toda la humanidad, fundando la Sociedad Murciana de Esperanto en 1902.
Hace unos años fui con unos amigos a ver un monólogo del actor Gabino Diego. En un momento del mismo se dirigió al patio de butacas y preguntó a los espectadores si conocían o habían oído hablar de Pedro Beltrán.
ResponderEliminarSilencio absoluto en la sala.
Pues bien, yo sí conocí, como Gabino Diego sabe, a "Perico" Beltrán Rentero, de quien Fernando Fernan Gómez dijo que fue "el último bohemio". Su vida y sus actos lo demuestran: novillero, guionista de cine, actor de reparto, tertuliano radiofónico (tuvo un programa muchos años en Radio Madrid, Cadena Ser)... Famosa era la tertulia del Café Gijón: M. Alexandre (el único que queda vivo), Fernando Fernan Gómez, Manolo Vicent, Juan Diego, Álvaro de Luna, etc, etc...
Es muy conocida la anécdota del Café Gijón en el que, invitado a una paella y servida la misma, se encontró una cucaracha en su plato. Él mismo se levantó de la mesa y, con mucha tranquilidad, se dirigió al maitre y le espetó:
<< - Por favor, ¿me puede usted cambiar "esto" por una gamba? >>
La película "El extraño viaje", dirigida por Fernando Fernán Gómez, con guión del propio Pedro Beltrán, duró muy poco en las salas e, incluso, la daban en cines de segunda en un programa doble. Hoy, pasados los años, "El extraño viaje" se ha convertido en una película de culto, y crítica y público se han puesto de acuerdo en que es la mejor película de Fernán Gómez.
Sus papeles en la gran pantalla son:
- Berlanga: "La vaquilla" y "El verdugo".
- Fernando Fernán Gómez: "El viaje a ninguna parte".
La última vez que estuvimos juntos fue en Murcia, en un homenaje que la filmoteca regional, con Joaquín Cánovas, su director, a la cabeza, daba al gran actor Paco Rabal.
Después de la conferencia y de cenar en la cafetería del hotel, estuvimos de tertulia hasta las seis de la mañana. Bueno, "de tertulia" es un decir, pues el que hablaba era él y los demás escuchábamos absortos.
Aunque su deterioro físico era evidente, su cabeza le funcionaba perfectamente.
Nunca volví a verle, pues jamás regresó a nuestra región. Estábamos preparando un viaje a Madrid para verle, cuando nos enteramos de su muerte, en el hostal donde estaba alojado, hace ahora dos años.
Fue precisamente Gabino Diego, al que le unía una gran amistad y con quien estaba preparando el guión para una nueva película, el que le encontró muerto.
Por último quiero reinvidicar a las Autoridades Municipales que tengan un detalle con este cartagenero, a quien Fernando Fernán Gómez calificó un día como "EL ÚLTIMO BOHEMIO".